(Jesús Miguel Relinque Mota, Profesor de instituto de Málaga) Indudablemente es totalmente esencial para nuestra vida personal, laboral, social ,nuestro desarrollo y evolución educacional que sepamos controlar y poner un límite a nuestros impulsos y reacciones excesivas.

Desde mi punto de vista como profesor con ya muchos años de experiencia a mis espaldas , es absolutamente necesario enseñar en las escuelas y en los hogares a niños y adolescentes a que sepan controlar sus acciones y poner límites a sus comportamientos que luego sino se controlan les pueden llevar a encontrarse en situaciones muy desagradables y a veces sin solución.

¿Es éste un objetivo educativo en las escuelas e institutos?

¿Se hace este trabajo por parte de los padres y madres en las casas con sus hijos e hijas ?

Realmente no lo sé , pienso que en la actualidad hay una gran permisividad con los niños y adolescentes y que no se les ayuda con esa actitud puesto que en el futuro de sus vidas les puede crear muchos problemas en muchos ámbitos.

La excesiva permisividad no ayuda al contrario hace que las personas sean caprichosas, dependientes y que no conozcan donde está el límite a la hora de comportarse con sus congéneres y puede crear situaciones de gran conflictividad.

La escuela, el hogar y la vida nos enseñan a saber hasta donde se puede llegar, pero la incógnita y mi incertidumbre es si esto se está llevando a cabo correctamente o por el contrario nos estamos equivocando y estamos criando y educando a personas que puedan tener muchas frustraciones a causa de no controlar su impulsividad y por ello perder relaciones de pareja, amistades, puestos de trabajo y sentirse finalmente aislados.

No se exactamente lo que está ocurriendo pero el simple hecho de planteárnoslo ya es un paso adelante, pues una de las grandes preocupaciones de padres, madres y profesorado es si estamos haciendo realmente las cosas bien con las futuras generaciones y desde luego esta preocupación está más que justificada pues ser padre o madre o docente es una enorme responsabilidad, ya que de ellos depende en gran parte  el futuro positivo o negativo en muchos aspectos de los niños y adolescentes del mundo.

En conclusión resulta vital hacer comprender a las personas desde edades muy tempranas que para convivir y vivir en sociedad hay que tener autocontrol y sino se posee , lo tendremos muy difícil en nuestras vidas porque constantemente nos estaremos poniendo zancadillas a nosotros mismos y chocaremos en múltiples ocasiones con los demás.

Por lo tanto es un objetivo educacional en las escuelas y hogares hacer comprender a los menores que hay unos límites que no se deben sobrepasar para poder vivir en comunidad de una manera sana y correcta.

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