(Jmm Caminero) Dicen que en España existen ahora dos generaciones de personas, los que tuvieron que asistir al servicio militar obligatorio y, los que no, incluyendo el periodo de cambio…

Es obvio y evidente, que yo pertenezco a los del primero, incluso, a aquellos que les tocó aquel 23F, ahora tan lejano, pero para aquellas personas que estaban degustando el rancho y el fusil en la mano, nunca se les olvidará.

No entro yo, aquí, si es mejor el servicio militar obligatorio en todo tiempo, o si es mejor el servicio militar profesional, en todos sus estratos. Ni tampoco, si en caso de urgencia, utilicemos esta palabra, primero, se instaría a filas de forma voluntaria a la población, y, después, en forma obligatoria por levas y por años.

Dicen que Europa desde el Neolítico, nos hemos hartado de agua y de frío y de calor, pero también de guerras. En la antigüedad con las ciudades o aldeas-Estado, y, cada una, federándose con las cercanas, y, cada federación en lucha o litigio con las otras. De ahí, surgen todas las unidades sociales y políticas, que podemos entrever, antes de la aparición del imperio cartaginés por estas tierras, y el imperio romano también por las mismas. En medio las primeras ciudades Estado de colonización, griegas, fenicias, cartaginesas, etc.

En un artículo del periodista Manuel Fernández Areal (1930, autor de 32 libros según la BNE), publicado en El Diario Regional de Valladolid, del 06 de noviembre de 1964, titulado: Un proyecto realista, nos habla de estas cuestiones, a raíz que en Francia iban a reducir el periodo de la milicia obligatoria para la población masculina… Parece ser, que por esa columna, relativamente pequeña en palabras para su época, que el autor periodista, debió de realizarla y construirla, se nota, con temor y miedo, sin negar todas las alabanzas al ejército, parece ser, decía, que tuvo un consejo de guerra, y se le echó seis meses de cárcel. No sé si la cumplió, no sé si hubo un perdón. No sé lo que sucedió. Pero si sé, un hecho, que refleja este caso y este artículo que comentamos: que es que la libertad de expresión y de conciencia y de publicación y de culto ha costado muchos sudores. Y, también sé, que, demasiadas veces, solo se ponen algunos héroes y no otros. Por ejemplo, este señor periodista, cuántos homenajes y recuerdos se le han hecho después…

No sé si en estos tiempos, no voy a indicar el adjetivo, aciagos, porque me parece demasiado negativo, pero como todos los tiempos con sus grises y sus negros y sus blancos y su arco iris, somos consciente que el actual sistema constitucional, fue el resultado de muchos esfuerzos, muchos dolores, muchos sufrimientos, muchas alegrías, muchas penas y muchas felicidades. Ahora, en estos días, que ha surgido, si mis datos no me fallan, un Manifiesto por la Constitución y la Democracia, no sé el nombre exacto, firmado por ciento cincuenta firmas, de todos los ámbitos y de todos los partidos constitucionalistas. En estos tiempos, habría que recordar, que la democracia, la democracia basada en Derechos Humanos, la democracia basada en el principio de la dignidad de cada ser humano, la democracia como separación de los tres poderes, la democracia con otras virtudes y características, ha costado mucho y mucho y mucho trabajo…

Hay que recordar, que habría que ser más prudente. Derribar y destruir para construir otro orden, puede ser atractivo para algunos o para muchos, puede ser más fácil, pero construir es muy difícil. Realizar la escultura de la plaza de tu pueblo, puede haberla hecho una persona, que ha tardado varios lustros en aprender el oficio, y, esa escultura haber dedicado a ella, seis meses de su vida. Y, ahora va un señor, que quizás apenas sabe leer, o acaso ha leído muchos libros, que con su ideología, la pinta de negro y la estropea, o la tumba con un pedrazo y se rompe en trozos… Porque construir es más difícil que destruir. Esta es la ley de la naturaleza. Construir una casa de madera, puede tardarse un año, destruirla con el fuego media hora…

Debe ser, que estamos en esta Piel de Toro, esta España, siempre recordando aquello del genial Antonio Machado, españolito que naces, alguna de las españas te destrozará el corazón. Hemos deseado que esto no se vuelva a repetir. Si redacto estas palabras es pedir una vez más, porque en temas de sociopolítica, raramente entro. Para recordar que no nos destrocemos el corazón otra vez. Ya tenemos una historia larga de ello. Dicen, que hay fuerzas muy fuertes, que están buscando y que estamos en el proceso de una Segunda Transición, que quieren derrocar lo que llaman el régimen del 78.

Yo soy, un lego en estos temas, más de la política práctica de cada día, porque no tengo información suficiente. Pero si les digo a los grandes empresarios de todas las regiones, que se pongan de acuerdo, que negocien entre ellos, que se vayan un fin de semana largo, a algún lugar perdido de este país o de otro. Y, que se pongan de acuerdo, que dejen tranquila la Constitución, porque cuándo se remueve y se entra en una cueva o una gruta, no sabemos si nos saldrá una lagartija o un oso de quinientos kilos o un ogro de los rencores y odios y temores y complejos y traumas que arrastramos desde siglos…

La paz y la paz y la paz y la paz política y el pan es lo esencial, para todos… porque con paz se puede solucionar todo y sin paz, todo se enreda, esa paz que tanto hablaba Juan XXIII, que tanto hablado Pío XII, esa paz que tenemos se esté resquebrajando… ¡Paz y bien y bienes y pax…!

http://filosliterarte.blogspot.com.es      © jmm caminero (21 enero-08 febrero 2023 cr).

Fin artículo 3.419º: “Mili o no mili”. 

 

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