Díaz valora que se hayan acortado los plazos pese a la complejidad de la obra y se compromete a mantener el ritmo en esta segunda fase
La carretera entre Ronda y San Pedro Alcántara ha reabierto esta mañana al tráfico tras reparar los graves daños sufridos por las lluvias torrenciales de marzo, que destrozaron parte del tablero y bloquearon el resto de la calzada con rocas de hasta 500 toneladas. La consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Rocío Díaz, ha visitado las obras, que aún continúan en la ladera, donde ha agradecido al medio centenar de operarios “su dedicación y esfuerzo para acortar los plazos y lograr reabrir antes de lo previsto uno de los carriles”
“La Serranía de Ronda recupera hoy un poco de normalidad después de meses que sabemos que han sido duros”, ha manifestado Rocío Díaz, consciente de la importancia capital de esta vía que conecta con la Costa del Sol y que “es determinante para la actividad económica y social de toda la comarca”.
La titular de Fomento ha valorado la paciencia de los vecinos y los alcaldes de los municipios afectados, “conscientes de que era una obra tremendamente compleja y también de que el Gobierno andaluz ha puesto todo de su parte para reabrir la vía”. Al respecto, ha recordado los trabajos de lunes a domingo e incluso nocturnos o la llegada de expertos en geotecnia y trabajos verticales en “esa búsqueda de una rápida y, a la par, segura solución al enorme daño ocasionado por la borrasca JANA en marzo”.
Rocío Díaz ha manifestado que este ritmo de los trabajos, que ha permitido adelantar dos semanas la reapertura de la carretera, continuará en la segunda fase de las obras, donde se seguirá mejorando la estabilidad y la seguridad de la ladera. “Hemos logrado lo más complicado, que es abrir la carretera en condiciones de seguridad, pero vamos a seguir estando muy encima de estas obras para que concluyan lo antes posible”.
Esta segunda fase se centrará en la estabilidad de la ladera mediante la instalación de medidas de sostenimiento adicionales y refuerzo del muro de hormigón. En esta fase se realizará un sistema de bulonado más profundo, que aumente la seguridad y consolide las medidas de contención de la ladera que ya se habían aplicado en la primera fase. De igual manera, se plantea que el muro tenga un anclaje en su cabecera al talud para poder aumentar su seguridad frente al vuelco.
Los trabajos comenzaron a mediados de marzo, con un presupuesto que finalmente ha sido de 4,5 millones de euros. En primer lugar se emprendieron todas las medidas para garantizar la estabilidad del talud, retirando todas las rocas inestables con maquinaria pesada, medios manuales con especialistas en trabajos verticales y, en último lugar, voladuras controladas. Asimismo, se instalaron membranas de contención y una pantalla dinámica. En las últimas semanas se procedió a la demolición y posterior reconstrucción del tablero del viaducto afectado.
La consejera de Fomento ha visitado estas obras junto a la consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos, Carolina España, los alcaldes de la comarca de la Serranía de Ronda, el viceconsejero, Mario Muñoz-Atanet; la delegada del Gobierno de la Junta en Málaga, Patricia Navarro; el director general de Infraestructuras Viarias, Alfonso Lujano; y la delegada territorial de Fomento en Málaga, María Rosa Morales.