La enseña es un obsequio institucional del presidente Juan José Imbroda al alcalde de Alhaurín de la Torre

En estos días ha quedado instalada en su mástil la nueva bandera de la Ciudad Autónoma de Melilla, sita en la esquina de la avenida que lleva su nombre. La enseña, de grandes dimensiones, fue un obsequio institucional del presidente melillense, Juan José Imbroda, al alcalde de Alhaurín de la Torre, Joaquín Villanova, en representación del municipio, cuya entrega se llevó a cabo hace algunas semanas en un sencillo acto.

El emblema de la Ciudad Autónoma luce con todo su esplendor gracias al potente color azul celeste que tiene como fondo y que es uno de sus distintivos más destacados, junto con el escudo característico de la casa de Medina Sidonia. La bandera actual sustituye a la anterior, que se encontraba bastante deteriorada por el paso del tiempo.

La avenida de Melilla se encuentra entre las calles La Torre y Jovellanos, muy cerca de la plaza de España y equivale a la prolongación de la calle San Pablo, justo antes de su transformación en avenida del Barrio Viejo. Fue inaugurada el día de San Sebastián de 2008, hace más de 17 años, en un inolvidable acto institucional que contó precisamente con la asistencia de Imbroda, protagonista junto a Villanova del descubrimiento de la placa en aquel entonces. Dicho nombramiento había sido solicitado por un grupo de vecinos naturales de la ciudad norteafricana y residentes en nuestro municipio, lo cual se concedió en 2005 en una Junta de Gobierno Local.

Ambos siempre han gozado de gran amistad y complicidad, máxime cuando llegaron a ser compañeros de trabajo en los años 70 en las instalaciones del Punto Industrial y coincidieron como senadores en la Legislatura 2000-2004.