Rocío Díaz destaca el impulso a una infraestructura “olvidada desde 2010” y que reforzará las comunicaciones del interior con la capital

La Junta de Andalucía ha licitado por casi 57 millones (56.906.462 euros) la conversión en autovía del tramo Casapalma-Cerralba de la carretera A-357. El Gobierno andaluz retoma así la Autovía del Guadahorce en un tramo que se llegó a adjudicar en 2010, hace 15 años, pero que nunca llegaron a iniciar los ejecutivos anteriores.

Rocío Díaz ha revindicado que, con este nuevo tramo, se “desbloquea una autovía clave para reforzar las comunicaciones de todos los municipios del Valle del Guadahorce con Málaga capital y la Costa del Sol”. La consejera ha recordado que tuvieron que empezar prácticamente de cero, porque se encontraron con “un proyecto antiguo, que no sólo debíamos actualizar, sino que además debía superar nuevamente el trámite ambiental”.

Las obras comprenden la construcción de una autovía en un tramo de 4,2 kilómetros en la A-357, comprendido entre el final de los ramales del enlace de Casaplama, ya construido, y Cerralba. El trazado de la autovía va en variante, en buena parte en paralelo a la carretera existente, que se mantendrá como vía de servicio y acceso a propiedades colindantes. Sólo se desvía del trazado original para cruzar el río Grande a través de un viaducto de 250 metros. Finalmente, se conecta en Pizarra con la actual carretera a través de una nueva glorieta, quedando el futuro enlace para el siguiente tramo de autovía (Cerralba-Zalea), que está en fase de redacción del proyecto por 258.700 euros.

La nueva carretera se conformará como una autovía de doble calzada, con dos carriles por sentido de 3,5 metros cada uno; arcenes exterior e interior de 2,5 y un metro, respectivamente; mediana de diez metros y bermas de un metro.

La Consejería de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda ha retomado el proyecto de autovía después de que no se hayan ejecutado más tramos de autovía desde 2010. Es más, las obras de este tramo entre Casapalma y Cerralba ya pasaron por el Consejo de Gobierno y fueron adjudicadas en enero de 2010, pero no llegaron a comenzar y el contrato se tuvo que resolver cerca de una década después por un coste cercano al medio millón de euros.

Posteriormente, en febrero de 2024, se adjudicó la redacción de la actualización del proyecto. Una vez finalizado el proyecto y superado el trámite ambiental, el Consejo de Gobierno aprobó la semana pasada la autorización del gasto para, a continuación, licitar las obras. Desde hoy, las empresas interesadas en ejecutar las obras tienen hasta el próximo 30 de septiembre para presentar sus ofertas a través del portal electrónico de la administración autonómica (Sirec).

En paralelo, la Consejería de Fomento ya está trabajando en la actualización de dos nuevos tramos con los que se va a aumentar la capacidad en ocho kilómetros del eje Málaga-Campillos-Ronda: el ya mencionado tramo entre Cerralba y Zalea, en la A-357, de cuatro kilómetros, y la duplicación de vía de otros cuatro kilómetros más en los accesos de la A-367 a su salida de Ronda.

La continuidad de la Autovía del Guadalhorce se enmarca en un plan de autovías que ha impulsado la Junta de Andalucía para la reactivación de infraestructuras viarias que se habían paralizado hace más de una década y que están llamadas a vertebrar la comunidad autónoma, con un montante global superior a los 200 millones de euros.

La carretera A-357 pertenece a la Red Básica de Articulación de la Red Autonómica de Carreteras de Andalucía con 69 kilómetros de longitud y está como autovía desde Málaga hasta Casapalma, con picos de tráfico que superan los 80.000 vehículos al día. A partir de Casapalma, donde acaba la autovía, la demanda se mantiene por encima de los 25.000 vehículos diario hasta Pizarra, donde confluyen las vías que recogen todo el tráfico de las comarcas de Antequera (A-343), Serranía de la Nieves (A-354), Guadalteba (A-357) y Serranía de Ronda (A-367).