(Por Luis Arias) La National Football League (NFL) da un paso decisivo en su expansión internacional. La temporada 2025 marca un hito con la celebración de partidos oficiales en nuevas sedes europeas —Berlín, Madrid y Dublín— y con la confirmación de un acuerdo histórico para llevar el espectáculo del fútbol americano a Australia a partir de 2026.

Por primera vez, tres países europeos acogen encuentros de temporada regular. El Estadio Olímpico de Berlín recibe a la liga estadounidense tras el éxito de las ediciones anteriores en Alemania. En Madrid, el icónico Santiago Bernabéu albergará un enfrentamiento entre los Chicago Bears y los Jacksonville Jaguars, mientras que Dublín debutará con un partido entre los New York Jets y los Carolina Panthers.

“Queremos que los aficionados europeos sientan que la NFL también es su liga”, afirmó el comisionado Roger Goodell durante la presentación del calendario internacional.

La expansión se apoya en el programa International Home Marketing Area (IHMA), que otorga a las franquicias derechos de marketing y promoción en mercados internacionales específicos. Actualmente, 21 equipos operan oficialmente en más de 40 países, lo que les permite abrir academias, organizar eventos y fortalecer su marca fuera de Estados Unidos.

El resultado es un crecimiento sostenido del interés global: en 2024, la audiencia internacional de la NFL aumentó un 23 %, y las ventas de merchandising subieron un 31 %, según datos oficiales de la liga.

Los partidos internacionales de la NFL generan un importante impacto económico. Los encuentros celebrados en Londres en 2024 dejaron más de 90 millones de dólares en beneficios directos e indirectos, mientras que Madrid 2025 se perfila para superar esa cifra gracias al atractivo del nuevo Bernabéu y al respaldo institucional.

En febrero de 2025, la NFL anunció su desembarco en Australia, con partidos programados a partir de 2026 en el Melbourne Cricket Ground (MCG), uno de los estadios más grandes del mundo. Los Los Angeles Rams y los Kansas City Chiefs figuran entre los equipos interesados en participar en el primer encuentro oficial en el hemisferio sur.

Aunque la liga no ha confirmado nuevas franquicias internacionales, varias fuentes señalan que Londres, Berlín y Madrid podrían ser candidatas a albergar equipos permanentes en la próxima década. Incluso se baraja la posibilidad de que el Super Bowl se celebre fuera de Estados Unidos en el futuro.

Con su expansión internacional, la NFL redefine los límites del deporte profesional estadounidense. La liga avanza hacia un modelo global en el que el fútbol americano busca consolidarse como espectáculo universal, con Europa y Oceanía como protagonistas de su nueva era.

Luis Arias – @prime1sport