(Junta de Andalucía Salud) Ante las declaraciones realizadas por el presidente del Colegio de Médicos de Málaga, Juan José Sánchez, la Delegación Territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales aclara:

En primer lugar, manifestar nuestra más absoluta repulsa ante una nueva agresión física a profesionales sanitarios, y tolerancia cero ante las agresiones.

Dicho esto, no podemos entender cómo el presidente del Colegio de Médicos de Málaga puede mentir de esta forma tan rotunda, cuando precisamente el pasado 6 se septiembre la propia consejera de Salud, Marina Álvarez, intervino en comisión parlamentaria condenando toda agresión verbal o física a los profesionales sanitarios. En la misma, reiteró la “sensibilidad y compromiso” del Servicio Andaluz de Salud (SAS) con las agresiones a profesionales. Dijo que: “Se trata, sin duda, de un tema muy sensible, que ha aumentado en los últimos años en todas las comunidades, y que exige una respuesta de toda la sociedad en su conjunto”. Además, señaló que “nuestro objetivo es conseguir un estado de tolerancia cero frente a las agresiones, y para ello ponemos todas las medidas y medios que sean necesarios”.

Asimismo, recodó que Andalucía cuenta desde 2005 con un Plan de Prevención y Atención de Agresiones, una iniciativa que se puso en marcha de manera pionera en el Sistema Nacional de Salud y que está en continua evolución. “El Plan contempla una batería de medidas elaboradas con el consenso de las organizaciones sindicales, el apoyo de las organizaciones colegiales, de asociaciones de consumidores y usuarios, además de estar en sintonía con las directrices establecidas por la Organización Internacional del Trabajo y la Agencia Europea para la Seguridad y Salud en el Trabajo”, subrayó.

Dentro de las líneas de este Plan existe un protocolo de actuación que se activa ante la notificación de una agresión en un centro sanitario y que incluye la asesoría jurídica al personal agredido, el apoyo psicológico si lo estima conveniente y la posibilidad de favorecer su traslado a otro centro si también lo solicita.

Precisamente, como resultado de la asesoría jurídica, el Servicio Andaluz de Salud ha logrado en 2017 en la provincia 27 sentencias condenatorias, de las que 5 han sido por delitos de atentado y el resto por amenazas, lesiones e injurias, entre otras. Además, durante el mismo periodo, la Asesoría Jurídica del SAS en Málaga ha realizado 28 asistencias letradas a profesionales víctimas de agresiones en el desempeño de su trabajo.

Los centros sanitarios de la provincia cuentan con elementos de seguridad como dispositivos de alarma o interfonos en consulta, videocámaras, salidas alternativas en consulta, instalación de software antipánico en ordenadores o personal de vigilancia, elementos de seguridad para asegurar un ambiente de confianza a profesionales y usuarios.

Son datos que ponen de manifiesto la labor que se viene realizando en la Consejería de Salud sobre esta materia, un ámbito que está en permanente análisis y evolución. Así, recientemente se ha puesto en marcha la figura de los interlocutores sanitarios territoriales en cada provincia y autonómicos para la coordinación con el protocolo de los ministerios de Sanidad e Interior (y con sus interlocutores policiales tanto de la guardia civil como de la policía nacional) así como para realizar el seguimiento de las distintas medidas de apoyo a los profesionales que han sufrido una agresión.

Asimismo desde 2008, el SAS imparte el curso online de Control de Situaciones Conflictivas. Hasta finales de 2017 se han formado a un total de 54.056 profesionales. El objetivo es que el mayor número posible de profesionales cuente con las habilidades sociales necesarias para evitar y abordar situaciones de conflicto en su relación con los usuarios.

En la misma línea, en diciembre del pasado año 2017, se difundió el procedimiento de ‘Cambio de oficio de profesional de medicina de familia y/o pediatría para la salvaguarda de la buena relación con la ciudadanía’. En él se describe las actuaciones y recomendaciones a seguir ante la aparición de situaciones de conflicto en la relación entre profesionales -medicina de familia y pediatría- y ciudadanía en el ámbito de la atención primaria. Dado que la relación y el trato adecuado del profesional al paciente y viceversa es un deber de ambas partes, es importante diseñar estrategias de abordaje que disminuyan estos encuentros difíciles.

Tasa de Agresiones

La tasa de agresiones por número de profesionales se sitúa en 2017 en 11,43 casos por 1.000 profesionales, una cifra que se mantiene estable en los últimos tres años. Si bien, a nivel nacional no existe un registro que permita conocer año a año como evoluciona este problema en el conjunto del Sistema Nacional de Salud y la última tasa disponible del conjunto de comunidades es del año 2011, cuando la media estatal era de 12,83 agresiones por 1.000 habitantes; por lo que Andalucía se encuentra en la actualidad por debajo de esa cifra seis años después.

Todo ello demuestra que no se trata de un problema exclusivo de la comunidad, ya que desgraciadamente afecta a todo el país, permaneciendo nuestros datos dentro de la media nacional. Sin embargo, nuestra comunidad intensificará las actuaciones en este sentido con tolerancia cero para rechazar cualquier tipo de actos de esta índole.