(Por Moisés S. Palmero Aranda Educador ambiental) Parece que en El Ejido, VOX coincide con Feijóo en que las vacaciones están sobrevaloradas. Vaya semanita llevan con el carril bici de Punta Entinas para unir Almerimar y Roquetas, y la dichosa valla en la que venden, proponen e incitan a la Violencia, el Odio y la Xenofobia. Ahora ya sabemos qué significan sus siglas y, por la libertad de expresión que defienden, podemos decirlo y opinar.
Otra cosa es que si algún día gobiernan, se olviden de ella y desempolven los protocolos de su idolatrado dictador y comiencen las purgas, los escarmientos y las desapariciones en las cunetas. Eso solo puede pasar si dan un golpe de Estado, porque confío en que en las urnas, por muchos votos que saquen, nunca lo consigan y los demás partidos cumplan su palabra (esto me da la risa) de gobernar sin ellos.
Pero vamos a lo que vamos, que me voy por las ramas. En Punta Entinas se proyectó en 2015, con el PSOE en la Junta, un proyecto para arreglar el GR 92 en el espacio protegido. En 2020, ya con el PP, lo volvieron a retomar, juntando dos proyectos para ahorrar dinero, o justificar el que se habían gastado en otra cosa. Copiaron y pegaron lo que había hecho y añadieron un carril bici. Dos chapuzas en una. El resultado era un sinsentido porque las condiciones ambientales habían cambiado por la subida del nivel freático, que inundó unos tramos del GR, y el viento de poniente que cubrió de arena otros.
Las asociaciones ecologistas y conservacionistas presentamos alegaciones al proyecto y conseguimos que parte del despropósito se corrigiese y que solo el primer tramo, después de desviarlo del recorrido inicial, pasase por el espacio protegido, y el resto lo rodease por fuera, pegado a la carretera y sin entrar en zonas de nidificación de aves como habían previsto.
Debo dejar claro que ambos proyectos los veo necesarios. El GR 92 hay que arreglarlo en todo el espacio protegido porque, ante la pérdida de las señales y del sendero original en algunos tramos, los ciclistas y senderistas están haciendo muchos caminos paralelos y aquello parece un circuito de carreras. Pero una cosa es señalizar, delimitar y limpiar el terreno y otra cosa es levantar el camino, construir un carril bici con todo lo que conlleva, poner alguna pasarela de madera y observatorios innecesarios que, estamos seguros, nadie va a mantener en el futuro y se van a convertir en un problema como lo son actualmente la rotura de las talanqueras por donde se cuelan los coches en la Reserva Natural a tirar basura o ahorrarse un puñado de metros para ir a la playa, los hierros oxidados de las puertas de entrada (que no te llevan a ningún sitio) y la pérdida y deterioro de las pocas señales que quedan. Siempre hay dinero para hacer las cosas (la friolera de 2,5 millones de euros) pero no para mantenerlas. Así que menos fotos de presentación de proyectos e inauguraciones y más cuidar las inversiones.
El carril bici también es necesario porque por la carretera que une Almerimar con Las Marinas pasan muchos ciclistas, apenas hay espacio y es peligroso.
El caso es que VOX pidió en el pleno del Ayuntamiento de El Ejido, mayoría del PP, que se exigiese a la Junta que el proyecto aprobado se pusiese en marcha. La mayoría del pleno, con algunas abstenciones argumentadas, lo acordó y llevó al parlamento andaluz la propuesta de una Proposición No de Ley para garantizar los plazos. Pero allí el PP andaluz no la aceptó, porque acusó a VOX de intentar apropiarse de algo que ellos ya tienen proyectado y a falta de licitación. Así que no salió adelante, y los de VOX publicaron en los medios que el carril bici solo fue anunciado como propaganda electoral, y los del PP que pronto verá la luz. Por cierto, estos días, sin la licitación, pero espero que con autorización, ya están trabajando y arrancando vegetación fuera del espacio protegido para hacerlo. No sé si es casualidad, pero así ha sido.
Me alegro de que VOX, o cualquier otro partido, se fije en Punta Entinas y piense en garantizar su conservación. Ya pidieron que se arreglasen las señales y se quitasen los neumáticos, peticiones que leyeron en los medios de las acciones que exigimos e hicimos hace tiempo. Cuando quieran les damos ideas nuevas, aunque no me crea su interés, salvo el de utilizar el medio ambiente, y en este caso Punta Entinas, como arma arrojadiza, porque en su negacionismo climático declarado no tienen como prioridad la conservación de la naturaleza. Aunque el fascismo, el capitalismo y el neoliberalismo se vistan de verde, fascistas, capitalistas y ladrones se quedan.
Como se enteren de que los flamencos y otras muchas aves son inmigrantes sin papeles, que cruzan fronteras de forma ilegal, y vienen aquí a comerse nuestras artemias salinas y a que les protejamos los humedales donde descansan, a lo mejor colocan una valla preguntando qué Punta Entinas queremos, si una llena de moritos, sabinas y tortugas moras, u otra (añorando otros tiempos) con suecas en bikini, tinto de verano y hoteles por toda la costa.
Yo también defiendo la libertad de expresión, pero sin ira. Así que, como cantaba Jarcha, que se guarden sus vallas, su miedo y su ira, porque en la España plural, diversa, multicultural y democrática queremos “¡Libertad, Libertad, Libertad! Si los fascistas de verde supieran….” Perdón, sin ira, que me vengo arriba y mezclo canciones, himnos y recuerdos de difícil digestión.