(Por Eduardo Madroñal Pedraza) “(…) hay que aprovechar igualmente las menores posibilidades de obtener un aliado de masas, aunque sea temporal, vacilante, inestable, poco seguro, condicional”. Lenin. “Debemos apoyar todo lo que el enemigo combata y oponernos a todo lo que el enemigo apoye”. Mao.
Sánchez se ha atrevido a decir no a la orden de Trump para que España aumente el gasto militar hasta el 5% del Producto Interior Bruto (PIB). En la prepotente incontinencia verbal de Trump aparece claramente la arbitrariedad del 5%: “Creo que deberían pagar el 5% en defensa. No creo que nosotros debamos hacerlo, pero creo que ellos sí. (…) creo que los países de la OTAN deberían hacerlo, sin duda alguna”. Esto hay que traducirlo, no del inglés al español, del idioma del agresor hegemonista a la lengua de los pueblos agredidos.
Estamos siendo testigos, con dolorosas imágenes, de muertes de inocentes, invadiendo nuestras retinas, del sangriento epítome de la dictadura mundial que la superpotencia estadounidense, con Trump a la cabeza, trata de imponer a los países y pueblos del mundo para paralizar su imparable ocaso imperial; y Washington alentando y sosteniendo el criminal genocidio israelí en Gaza, y disparando ahora sus misiles contra Irán.
Las bombas estadounidenses sobre Irán están dinamitando la situación mundial, y exacerbando las contradicciones en todo el planeta, también en Europa y en España. Por tanto, la imposición yanqui a Europa de más rearme y un mayor encuadramiento a las órdenes de Estados Unidos está exacerbándose. Y, por tanto, los ataques contra quienes, como Pedro Sánchez, se niegan a cumplir la exigencia del 5% en gasto militar conminado manu militari por Trump.
Las espadas están en alto
Estamos de acuerdo con Enric Juliana que “política exterior y política interior forman siempre una unidad dialéctica”, pero añadimos que la situación internacional determina la situación nacional, es decir, que en una unidad de contrarios siempre domina uno de los dos que componen tal unidad.
Sánchez se ha plantado frente a la exigencia del 5% del PIB en Defensa, un gasto anual de 80.000 millones de euros, impuesto a todos los miembros de la OTAN por imposición de una superpotencia en su ocaso. El gobierno español ya ha elevado el gasto militar para este 2025 hasta el 2,1% del PIB, lo que supone un incremento de más de 10.400 millones de euros anuales, un aumento del 50%.
No al rearme trumpista
Estamos redactando el artículo en la madrugada del día 24 de junio. No sabemos cómo se va a desarrollar el agudo choque en marcha. Después de las declaraciones de Sánchez, el secretario general de la OTAN, esbirro de EEUU, ha vuelto a presionar para que España obedezca. No sabemos si Trump tiene preparado un ataque a Sánchez durante la cumbre de la OTAN en La Haya, al estilo humillante ya practicado con los presidentes de Ucrania, Zelenski, y de Sudáfrica, Ramaphosa.
Cualquier ciudadano español que defienda de verdad su país, que no sea un patriota trumpista, y aún más si se considera progresista, debe apoyar una decisión que también nos fortalece como pueblo.
“Sánchez dimisión”, el menú trumpista para España
Respaldamos al actual gobierno de progreso en España en esta dramática coyuntura internacional y nacional. Por supuesto, denunciamos la corrupción, y la extensión que la corrupción ha alcanzado dentro del PSOE; denunciamos el “y tú más”, pero no estamos de acuerdo, en absoluto, con la posición de Podemos declarando el “fin de la legislatura”, “el partido de la guerra” y “la lucha cainita contra Sumar”.
Nuestro apoyo al gobierno de progreso no es contra la ultraderecha y la derecha; es un apoyo contra Trump, la oligarquía española, y sus derechas y ultraderechas, profundamente antipatriotas y esencialmente antidemocráticas.
Medidas severas contra corruptos y corruptores
Sánchez debe asumir la gravedad del caso y poner luz y taquígrafos al servicio de la justicia. Hay que juzgar a los corruptos y a los corruptores, a Koldo, Ábalos y Santos, y también a Acciona.
Pero eso solamente no basta. Hay que redistribuir la riqueza. Porque, mientras la economía va como un cohete, crece la pobreza, y nosotros, la mayoría, vamos como un tiro, cada vez más heridos, con una gran parte de la población para la que la vivienda es un “lujo”.
Posdata. Apoyo como individuo, pero uso apoyamos en el título como plural sociativo y de modestia, como expresión colectiva de todas las personas que lo compartan.
Eduardo Madroñal Pedraza
