El Colegio de Enfermería de Málaga alerta sobre la alarmante carencia de enfermeras escolares en Andalucía y la provincia de Málaga, poniendo en riesgo la salud de los estudiantes
El Colegio de Enfermería de Málaga, liderado por José Miguel Carrasco Sancho, alza la voz ante la preocupante escasez de enfermeras escolares en Andalucía, centrando su atención en la problemática que afecta a la provincia de Málaga, según revelan los datos extraídos del estudio del Observatorio de Enfermería Escolar del Consejo General de Enfermería (CGE).
El Colegio de Enfermería de Málaga, a través de su presidente, José Miguel Carrasco Sancho, se pronuncia ante la situación preocupante que enfrentan las enfermeras escolares en Andalucía, con un enfoque específico en la provincia de Málaga, a raíz de los datos recopilados por el Observatorio de Enfermería Escolar del Consejo General de Enfermería (CGE).
Desafíos de la enfermera escolar en Andalucía y Málaga
Según los datos del estudio, Andalucía cuenta con 426 enfermeras adscritas al programa de salud escolar desde Atención Primaria, pero lamentablemente, las enfermeras escolares son casi inexistentes en la región. Como ha reseñado Carrasco Sancho “esta falta de personal especializado en las escuelas es alarmante y deja a nuestros alumnos en una situación vulnerable en términos de salud y bienestar”.
Y es que, en nuestro país, la situación de la enfermera escolar refleja una realidad preocupante. “A pesar de los avances en otros lugares de España, seguimos enfrentando carencias significativas en la atención de salud en las escuelas, donde persisten notables desigualdades entre las comunidades autónomas en cuanto a su presencia. Castilla-La Mancha cuenta con tan solo 22 enfermeras escolares para atender a 363,126 alumnos, mientras que, en Asturias, una enfermera atiende a 133,837 estudiantes, y en Navarra, hay 9 enfermeras para 117,871 alumnos” ha desarrollado Carrasco Sancho.
Además, el presidente de las más de 9.000 colegiadas malagueñas ha enfatizado que la insuficiencia de enfermeras no es el único problema. “Llevamos tiempo observando una coexistencia de distintos modelos de atención en las escuelas, lo que provoca una falta de uniformidad en la calidad y cobertura de los servicios. Uno de estos modelos es el de la enfermera asignada en un centro presencial a jornada completa, que es el que se reclama desde la profesión enfermera por su mayor eficacia. Por otro lado, existe el modelo de la enfermera referente que se desplaza desde Atención Primaria para realizar educación para la salud en momentos puntuales, como ocurre en nuestra región. Un modelo que no satisface todas las necesidades de la comunidad escolar, dejando a los estudiantes en una situación de vulnerabilidad en materia de salud”.
Principales conclusiones y desafíos
Por tanto, los datos recopilados en este estudio dejan claro que, a pesar de ciertas mejoras en algunas comunidades autónomas, aún estamos lejos de cumplir con los estándares internacionales recomendados. “España vuelve a suspender en Enfermería escolar y cuenta con una enfermera por cada 6.685 alumnos, lo que mejora un 30% los datos del año anterior cuando se contabilizaba una enfermera por cada 8.497 alumnos. La situación en Andalucía y particularmente en la provincia de Málaga es un ejemplo de esta brecha preocupante” defiende José Miguel.
Además, como reseñan desde el Consejo General de Enfermería resulta esencial destacar que en un contexto en el que no existe un reconocimiento ni una titulación específica normalizada para las enfermeras escolares, el 75% de estas profesionales ha buscado formación especializada por cuenta propia para poder desempeñar su trabajo de manera más eficiente.
Por otro lado, según la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria, se estima que un 25% de los menores que acuden a un centro escolar padece una enfermedad crónica. “De hecho, en el estudio que hemos realizado refleja que las enfermeras escolares prestan atención sanitaria a alumnos con problemas de salud crónicos, al menos, una vez al mes. Más del 70% de las enfermeras encuestadas reconoce haber atendido situaciones graves como crisis respiratorias, hipoglucemias o crisis alérgicas, además de realizar atención directa a una media de 20 alumnos por día, hacer seguimiento a crónicos y realizar actividades de promoción para la salud”, explica Tamara Domingo, enfermera del Instituto de Investigación Enfermera.
Necesidad de acción inmediata
En este contexto de urgencia, el Colegio de Enfermería de Málaga se une al llamamiento del Consejo General de Enfermería y las asociaciones de pacientes y sociedades científicas enfermeras escolares para instar a las autoridades de Andalucía y a nivel nacional a tomar medidas urgentes. “Es fundamental que se garantice la presencia de enfermeras escolares en cada centro educativo de la provincia de Málaga y en toda Andalucía. La salud de la comunidad académica, la inversión en nuestro futuro y su capacidad de aprendizaje dependen de ello”.
Además, ha proseguido el presidente, “la enfermera escolar debe ser parte activa y referente de salud para toda la comunidad escolar. No se trata solo de atender enfermedades o lesiones, sino de promover la salud, detectar conductas de riesgo, fomentar hábitos saludables y proporcionar un entorno seguro para nuestros alumnos”.
Por todo ello, desde el Colegio de Enfermería de Málaga instamos a las autoridades a tomar medidas concretas para mejorar la situación de las enfermeras escolares en Andalucía y en la provincia de Málaga. “Nuestros estudiantes merecen un entorno educativo saludable y seguro, y las enfermeras escolares son esenciales para lograrlo” ha concluido José Miguel.
