(Izquierda Unida y Podemos) solicitan a Diputación que abone «de manera inminente» a los ayuntamientos los importes destinados a desafección incluidos en el Plan Málaga
SÁNCHEZ: “9 meses sin recibir ni un euro de esta Diputación Provincial, 9 meses de retrasos que han sido asumidos por los ayuntamientos a pulmón y que han estado aderezados con visitas propagandísticas y videos promocionales”
La confluencia de Izquierda Unida y Podemos en Diputación, solicita al ente supramunicipal que se abonen de “manera inminente, antes de que termine 2020, las cantidades establecidas en el Plan de Desinfección incluido en el Plan Málaga, dando cumplimiento a los compromisos adquiridos con los ayuntamientos, habiendo sido estos los que, durante la pandemia, han asumido los costes de higienización de los espacios públicos”.
“Desde que se iniciase la crisis sanitaria, los ayuntamientos han sido, una vez más, el salvavidas de sus vecinos y vecinas, del tejido social y productivo de sus municipios. Han estado en la primera línea de la pandemia, organizando la desinfección de sus municipios, controlando el cumplimiento de las normas sanitarias, velando por la asistencia sanitaria, atendiendo a los sectores más vulnerables, desde las residencias hasta el servicio de ayuda a domicilio, facilitando ayudas económicas de emergencia para necesidades básicas hasta equipos de protección individual tanto a sus propias plantillas como a las de empresas privadas que gestionan servicios públicos en sus municipios”, apunta la, portavoz de la coalición, Teresa Sánchez, “en definitiva, han asumido la situación extraordinaria que ha provocado la crisis sanitaria, con todo el gasto extraordinario que ello ha ocasionado. Han arrimado el hombro y se han puesto manos a la obra porque no había tiempo que perder para frenar la expansión del virus y las graves consecuencias provocadas por el mismo”.
Sánchez subraya que los ayuntamientos han acometido estas acciones “siendo conocedoras de que son las administraciones con menos recursos económicos, pero con más responsabilidad ante la ciudadanía, con menos competencias pero los primeros en tener que dar la cara y dar soluciones, y sabiendo que, sí o sí, dependen en gran medida de los servicios y la financiación que les debe prestar esta Diputación Provincial y el resto de administraciones supramunicipales que deciden e inciden en la vida de sus pueblos, especialmente en los municipios de menos de 20.000 habitantes, ámbito de actuación que debería ser preferente para los equipos de gobierno que se suceden en esta casa”.
Sin embargo, desde que en marzo recibieron los primeros fondos incondicionados del Plan de Asistencia y Cooperación 2020, no ha sido hasta finales del mes de noviembre que no han empezado a recibir la anunciada financiación de los distintos planes del Plan Málaga. “Prácticamente 9 meses sin recibir ni un euro de esta Diputación Provincial, 9 meses de retrasos que han sido asumidos por los ayuntamientos a pulmón y que han estado aderezados con visitas propagandísticas y videos promocionales”, denuncia la portavoz.
Junto con el Plan de Impulso, el Plan de Reactivación Económica, el Plan de Asistencia y Cooperación y las exenciones de cuotas de los distintos Consorcios, que se remitió a los Ayuntamientos en documento, figuraba un Plan de Desinfección. Este Plan de Desinfección era el reflejo del compromiso que el presidente de la Diputación adquirió con los ayuntamientos de aportar financiación extraordinaria y suficiente para cubrir los gastos que estaban asumiendo los Ayuntamientos al estar realizando la desinfección de espacios públicos.
“Aunque este Plan de Desinfección recogía, para municipios menores, cantidades que rondaban entre los 6.000 € y 8.000 €, nada más se sabe de este compromiso, y aunque la financiación era a todas luces insuficiente, los ayuntamientos contaban con esas cantidades para cubrir parte de los gastos de los productos de limpieza para la desinfección o para compensar la gasolina a los agricultores que con sus tractores se ofrecieron para realizar estas labores”, incide Sánchez.
